Rabita está embarazada y tenemos curiosidad en saber si todo marcha bien. Se acerca el momento del parto y pasa la mayor parte del tiempo en su madriguera.
Pensamos que lo mejor sería que Rabita acudiera a la Clínica veterinaria y ... pedimos la cita.
Sin pereza y tranquila, Rabita se dejó coger como siempre y la pusimos en su particular transportin.
Una coneja de campo no conoce la ciudad. Miraba a través del cristal de la ventanilla.
TODO LE PARECÍA IMPRESIONANTE y con esa calma que la caracteriza llegaron a la bonita clínica.
Empieza la exploración y ahora sí que comienza a TEMBLAR.
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¡Qué extraña me siento a esta altura!
¡Están tocandome la tripa, oh! |
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Esta doctora me trata con mucho cariño | | |
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Me olvidé cepillarme los dientes, ¡QUÉ DESPISTE! | | |
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Hoy me echarán de menos en el colegio. |
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¡Uffffff, esta posición es algo incómoda! |
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Esto es muy divertido ¡me hace cosquillas! |
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¡¡¡Ay!!! |
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¡Estoy totalmente preparada para amamantar a mis gazapos! ¡¡¡¡¡BIEN!!!!! |
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mmm.... ¡No entiendo nada! |
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¡¡¡¡¡¡INCREIBLE!!!!!! |
Rabita escuchó por primera vez la palabra ECOGRAFÍA.
Nuestra Asociación EQUIDENA, formada por todo el alumnado y profesorado , le agradece a la CLÍNICA SAHUESO la atención prestada a nuestra querida mascota Rabita.
Qué reportaje más interesante!!!!!
ResponderEliminarmaestra me gusta que lleveis a rabita a y que si puedo quedarme con una cría de conejo.
ResponderEliminarSI ME DEJAS TE LO AGRADECERIA.